ArtículosAviación GeneralPiloto PrivadoPrácticas para obtención de licencia

Routing Aeropuertos de Sabadell – Lleida Alguaire

Sí, mucho tiempo sin escribir en el blog. Han pasado muchas cosas, demasiadas y demasiado seguidas para asumirlas todas y poder escribir sobre ellas. Iré actualizando lo sucedido en varias entradas nuevas, a tiro pasado. Ésta es la primera de ellas.

El 11 de Mayo de 2011, tenía programado otro vuelo de routing con mi instructor, Rafa Molina. Tenía que planificar la ruta de ida y vuelta al aeropuerto de Lleida-Alguaire (LEDA), desde y hasta nuestra base en Sabadell (LELL).

Planificación

Días antes, estuve haciendo los pertinentes cálculos, que debido a mi escasa predisposición a los números de cabeza, se me antojaba una tarea algo pesada, pero que resolví gracias a un Excel con algunas fórmulas automatizadas, de forma que tramo por tramo, introduzco altura, velocidad, distancia, y consumo de combustible, y me devuelve los parámetros de tiempo de llegada y combustible restante. El consumo lo introduzco de 15,4 Galones/hora si es un tramo de ascenso, o de 9 Gal/h si es en crucero. Sé que es más de lo que consume realmente el avión, pero prefiero disponer de ese margen de más.

Tuve que comprar la carta Jeppesen actualizada a 2011, ya que en la de 2010… todavía no aparecía Alguaire!

La ruta la calculé para entrar por el punto E de LEDA, de forma que la ida es un trazo de rumbo casi constante entre el punto de salida de LELL y la entrada en LEDA. Preveo pasar por Capellades, bordear Igualada, seguir hasta Tàrrega dejando Balaguer a la derecha. Hasta aquí no hay pérdida posible ya que sigo una autovía, pero… ¿y luego qué?

Aunque hace menos de un año volé dicho trayecto de pasajero en una Rocket con Escáner, poco recuerdo de puntos de referencia, así que tiro de Google Earth y estudio puntos de fácil reconocimiento entre Tàrrega y el punto E. Me fijo dos; uno es Linyola, un pequeño pueblo con una gran rotonda con una estrella ajardinada, muy visible, y el otro es Térmens, un pueblo alineado con un río y una línea férrea al sur de Balaguer. Este último es además el punto en el que iniciar el descenso.

Me había planificado la ida a 5.000 pies, pero Rafa me corrige y me recuerda la norma no escrita de ir en alturas pares +500 en dirección W e impares + 500 en dirección E… “Hacia Portugal, Pares; hacia Italia, impares”.

Además de programarme la ruta y analizar la zona con el Google Earth, repito el vuelo con el Flight Simulator X en la Cessna 152 de Carenado utilizando un escenario fotorealista, justo para descubrir que el escenario fororealista que he instalado termina justo antes de Lleida y que LEDA no aparece, cosa que aprovecho para practicar una toma fuera de campo sin motor.

La vuelta la programo saliendo de LEDA por el S, sobrevolando el campo de Alfés (antiguamente utilizado por Polikarpov I-15 Chato e I-16 Mosca durante la guerra Civil Española), seguir pasado Arbeca, y continuar hacia Igualada pasando por detrás de Montserrat. Pero no me aplico a buscar cómo es lo que voy a encontrar de regreso, ni en el Google Earth ni en el Simulador, para ponérmelo yo mismo un poco más cuesta arriba al verme identificando pueblos y referencias varias sólo con la carta Jeppesen.

La ida

Llegado el momento, cartas y mapas a bordo, GPS para utilizarlo sólo como datalogger, y cámara instalada grabando. Al aire en Sabadell. Estaba activa la pista 13, hacemos la salida estándar hacia el SW… ascenso hasta pasada la autopista, viraje siguiéndola hasta sobrepasar un castillo a la izquierda, luego rumbo 180 directo a la torre de Collcerola sin dejar de ascender, cuando la ciudad de Barcelona es visible detrás de la montaña, y salvando Sant Cugat, viraje a la derecha hasta 285º, directo a sobrevolar el Hospital General de Catalunya. Y sobre su vertical…

-“5 millas fuera, Echo Charlie Delta Kilo November”- todavía me produce un cosquilleo decir esto, estoy demasiado habituado a quedarme dentro del ATZ haciendo tomas y despegues. Esto es como salir hacia lo desconocido, lejos de casa.

-“DKN, para información de tráfico en 127,7”.

-“A la escucha en 127,7, hasta luego, DKN”.

Pulso el botón de cambio de frecuencia, qué extraño se hace escuchar a los aviones de pasajeros… pero volar miles de pies por debajo de ellos. En lugar de estar haciendo spotting con un escáner en mano…
Inicio el routing, despliego el mapa, Rafa me va comentando truquillos para identificar correctamente los puntos de referencia, especialmente pueblos. No confiarse. Asegurar que cada pueblo es realmente el que creemos que es. No confirmar nada si algo no encaja.

Pasamos Capellades. No lo identificaba bien, no veía la línea férrea… hasta que le da el sol a las vías.
Sintonizamos Igualada. No he hecho esto nunca, pasar por un campo de ULM y sintonizar sólo para informar que pasamos por ahí. Rafa me comenta cómo hacerlo:

-“Igualada buenas, EC-DKN en ruta a Lleida a 5 minutos de alcanzar el Castillo a 4500 pies, ¿algún tráfico en la zona?”

Y la respuesta de alguien que pasaba por allí…

-“La EC-XXX a 5 minutos también del Castillo pero a 5.000, os tenemos a la vista, vamos hacia La Cerdanya.”

Muy bien, así que tenemos un tráfico cerca, con el que convergemos pero del que enseguida nos separaremos. No le vemos porque nos viene desde las 9 y arriba, justo sobre el plano, pero si él nos ve a nosotros, perfecto.

La radio enmudece. Minutos después, ya alejándonos de LEIG, volvemos a cambiar a Barcelona en 127,7. La radio está bastante tranquila. Rafa y yo vamos hablando y sigo con mi tarea de identificar todos los pueblos por los que vamos pasando… mientras sigo pilotando, claro… 🙂

Pasamos por la vertical de Sant Pere dels Arquells, inconfundible pueblo por hallarse en uno de sus patios tres cazas soviéticos, en estado de chatarra pero bien conservados externamente, propiedad de un coleccionista.

Llegando a Cervera, Rafa me señala un hecho característico de este pueblo, y es que hay un enorme edificio blanco, visible desde gran distancia. Fantástico, entre esto y la forma de la autovía, llegamos a Tárrega y continuamos en el mismo rumbo. Llega la parte de los pueblos que no conozco mucho, veremos si el Google Earth y el simulador con su escenario fotorealista estaban actualizados… Cuando llego a Linyola, me acerco un poco más al pueblo para ver si está aquí la rotonda con la estrella. No la veo. Alabeo un poco para conseguir ángulo visual y… sí señor, allí está!

Continuamos. Térmens aparece delante, que identifico más por su posición relativa a Balaguer, que por tamaño se ve perfectamente, que por su forma y ubicación. Me aseguro. Sí, es Térmens. Iniciamos descenso con mismo rumbo. En breve deberíamos llegar al punto E, ubicado encima de un pueblo llamado Albesa . Este pueblo sólo lo he visto en el Google Earth, en el simulador ya no aparecía. En él, había una nave industrial verde, con forma de L. La busco y sí, allí está, perfecto.

Momento de cambiar a la frecuencia del campo y notificar. Hoy es un día entre semana, así que no hay controlador en LEDA y es un campo autocontrolado.

-“Buenas Alguaire, EC-DKN para toma final, algún tráfico en la zona?”

No hay respuesta.

Bien, nos dirigimos hacia el campo, como hay una bruma ligera aún no se ve desde E, así que sintonizamos su VOR para asegurar el tiro. Más o menso vamos bien. En dos minutos aparece la característica e inconfundible torre de LEDA. Directos a la vertical del campo, para ver la manga y así elegir pista.

Ubicados, veo la manga y elijo la pista 31.

-“EC-DKN en la vertical del campo para viento en cola izquierda de la pista 31”.

-“EC-XXX entrando en S para toma y despegue”.

Se suma un tráfico al circuito, pero nosotros llegamos antes. Sobrevuelo la pista, viro a la izquierda a viento en cola, preaterrizaje, viro a base, y al virar a final, me percato de lo realmente ancha y larga que es la pista. Parece que nunca llegue, que todo vaya más lento. La recogida se me hace un tanto extraña, pero me gusta la toma. Salgo para parking, y aparco en una zona para helicópteros al lado de una Cessna 182 estacionada. Aparte de ésta y una Katana de escuela, la plataforma está desierta.

Tras aparcar, recogemos los bártulos y vamos hacia la terminal. Rafa es más rápido en este proceso, y yo tardo un poquito más entre que apunto el horómetro y recojo todo. Chaleco, carnet de alumno piloto, certificado médico, papeles y llaves del avión, dinero… lo tengo todo.

El regreso

En la oficina, pago las tasas, 5€, menos mal que este aeropuerto no es de AENA… El meteorólogo nos facilita la información local, está todo despejado y un viento moderado. Me sellan el papel conforme he estado aquí. Vamos a la cafetería. Un par de directivos del aeropuerto, algunos jubilados y algo de personal de limpieza son los únicos habitantes de la cafetería, casi vacía. Un pitillo y al avión de nuevo. Pasamos el control de seguridad. Como si fuéramos un pasajero cualquiera, todo lo metálico por el detector y pasamos por el arco de seguridad. Mis zapatos pitan por el refuerzo metálico. Me cachean ligeramente. Vamos al avión. Prevuelo, y arrancamos.

-“EC-DKN al punto de espera para salida por pista 31”.

-“EC-XXX (no recuerdo el indicativo), estamos en final instrumental a 15 millas.”

Uy, esto debe ser un pez gordo si notifica con tanta antelación…

Termino los procedimientos prevuelo en el punto de espera, canto listo y el tráfico notifica corta final.

Respondo que mantenemos posición. Mi punta del plano izquierdo me lo tapa.

De pronto aparece, y resulta ser uno de los Falcon 900 de transporte VIP del Ejército del Aire, que hace una toma y despegue, espectacular!

Me espero un poco a entrar en pista, por si la estela turbulenta. Cuando entro y alieno, me detengo, comunico en despegue y pregunto al Falcon si regresan para otra toma. Que negativo, que se vuelven para Torrejón.

Doy gas, pese a que estamos saliendo desde mitad de pista, tengo por delante más metros que si despegase desde Sabadell; aquí la pista parece no terminar nunca. Sigo sin fiarme de la presencia de estela turbulenta del Falcon, así que al levantarme del suelo, dejo que el avión se salga del eje de pista hasta estar fuera del recinto aeroportuario antes de final de pista.

Viramos al Sur, al punto de salida marcado por una curva de 90º de las vías del AVE a su paso por Lleida. Una vez allí, notificamos que salimos del CTR y viramos hacia Alfés. Le pido a Rafa que no me diga dónde está, que lo quiero encontrar visualmente. Al poco empieza a intuirse el campo y pongo rumbo a su vertical. En 123,5 no responde nadie. Volvemos a 127,7. Seguimos por Arbeca, y en adelante me guío sólo por el mapa para identificar cada pueblo. Para mí esto es territorio desconocido. No he pasado nunca antes volando por aquí, no conozco los pueblos ni de haber estado en ellos, sólo me suenan de oídas. Veo un par de sitios que serían interesantes de visitar desde tierra, castillos con apariencia de tranquilos retiros.

Superamos una montaña con su cima salpicada por molinos de viento, volvemos a cruzar Igualada, comunico y pregunto si hay tráfico. Esta vez una voz con marcado acento francés responde que están entrando en caja acrobática al norte del campo… Ah, que los del Midi-Pyrenees venían a hacer un stage de entrenamiento acrobático… Quizá acabe de hablar con Faucon, habilidoso piloto virtual del simulador IL-2 Sturmovik, ahora piloto acrobático de nivel avanzado en dicho club. Miro afuera pero no veo al tráfico, aunque me mantengo fuera de la zona.

Alcanzando November para regresar a LELL, voy hablando con Rafa, craso error aunque al sintonizar la frecuencia de Sabadell todo parezca tranquilo. Sigo hablando con Rafa antes de notificar. De pronto un tráfico habla. ¿Qué ha dicho? No lo he escuchado.

-“Que está orbitando en November a 3000!”

Voy a hablar, pero me levanta la mano en señal de silencio, para que escuchemos la radio. Que esto no es un juego me lo recuerda de repente cuando señala a mi izquierda, y gesticula con las manos indicándome lo que tengo que hacer.

Lo que veo me horroriza. Hay una Mooney a nuestra misma altura por la izquierda, en rumbo de colisión lateral con nosotros, virando a izquierdas. Le subo por encima y nos pasa por debajo. Dejo de verla y Rafa la sigue con la mirada. Miro adelante y hay un helicóptero más abajo.

-“Un heli…”

-“Shhhh!!!”-me espeta Rafa. Está buscando un hueco en la radio para hablar.

-“Sabadell torre, buenas, EC-AAA alcanzando E a 3000.” – y torre responde con toda la ristra de instrucciones.

-“Sabadell torre, buenas, EC-BBB” – y detrás toda la ristra de comunicaciones para autorización de rodadura.

-“Mantén la altura! Importantísimo!” Rafa me commina a que me concentre en pilotar. Sigo orbitando a la izquierda, la Mooney fuera de mi ángulo visual, queriendo notificar posición a torre y a los demás tráficos, la radio no para y llevo ya una vuelta completa, sin que nadie sepa que estoy aquí.

-“Sabadell torre, buenas, EC-CCC” –oh, no, otro tráfico arrancando! 20 segundos más de radio ocupada, aunque acaban de activar la frecuencia de rodadura y se lo quitan rápidamente de en medio.
-“Sabadell torre, buenas, EC-DDD alcanzando E a 2500” –pero esto que es, dejadme hablar!!!

Tengo el pulgar sobre el botón del PTT como si estuviera a punto de disparar una ráfaga en combate aéreo. Termina la última comunicación y no le concedo ni dos segundos de espera…

-“Sabadell torre, buenas de nuevo, EC-DKN orbitando November a 3300.”

-“Estación llamando, nos hemos pisado, repita, break break, EC-AAA, proceda a viento en cola izquierda pista 13.”

Repito mi notificación.

Me autorizan a final, detrás del tráfico precedente… y cuándo han autorizado a la Mooney?

Fastidiado por cómo va a terminar un vuelo que hasta ese momento había sido fantástico, arruinado por los nervios de no saber gestionar una situación con excesivas comunicaciones, entro en final, y el aterrizaje resulta un poco desastre, con desplome y toma dura inclusive.

Rafa me insiste en que tengo que escuchar la radio, que es vital. Tomo nota, he pasado momentos de inquietud… todo por hablar, no escuchar y no comunicar a tiempo.

Reviso la grabación de vídeo de la cámara, para mi sorpresa descubro que por las prisas en LEDA, no la he parado y ésta ha seguido grabando con el avión detenido en plataforma, resultando en que la batería se ha agotado durante el vuelo de regreso.

Vaya, como decían por ahí, parece que esto de volar se trata de horas y horas de aburrimiento… para pasar bruscamente a segundos de pánico si uno se despista! Me lo grabo a fuego vivo en la cabeza, en los puntos de notificación hay que estar más atento…

Sobre el resultado del routing en sí, esto es lo que el Garmin que llevaba encima ha grabado:

Parte de la ruta de ida:

Pasada sobre la vertical de LEDA, entrada en circuito, aterrizaje y posterior salida:

Cruce entre las rutas de ida y de regreso:

Parte de la ruta de ida y la de regreso, con las esperas en November en la parte superior:

La ida vuelta completas:

En fin, os dejo con el vídeo del vuelo de ida a Alguaire y parte del de vuelta, no aparece el caos de comunicaciones en November, pero por algo lo he escrito.

Que lo disfrutéis, y como siempre, espero que el relato le sea útil a alguien…

Tuckie

Piloto acrobático, videoblogger de aviación, piloto virtual, videospotter y gran entusiasta aeronáutico.

Publicaciones relacionadas

Un comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba